La Nutrición ha dejado de ser tenida en cuenta solamente para el manejo del peso corporal o para el aporte de nutrientes, esta inevitablemente presente en todas las áreas médicas.
La Nutrición como especialidad, puede parecer sencilla y suele tomársela con liviandad en muchos ámbitos, incluso académicos, hasta que se observan las dificultades en la práctica diaria.
Es un pilar fundamental en la salud humana y como tal su importancia es indiscutible y ha sido ampliamente estudiada y aplicada a lo largo de los años. Prácticamente no existe especialidad ni motivo de consulta que no finalice con algún consejo alimentario, relacionado tanto con la salud como con la enfermedad.
Comemos por diferentes motivos: por placer, para relacionarnos con los demás, para obtener energía para realizar nuestras actividades, por hambre, por diferentes costumbres familiares y por muchos otros motivos. Por eso es importante aprender a diferenciar el apetito real; biológico, del apetito de lo rico, de la ansiedad, del apetito por aburrimiento, etc.
Adquirir estrategias para una buena selección y cantidad de alimentos y no una dieta nos llevara sin lugar a dudas a mantener no solo un peso saludable sino una buena calidad de vida, recordando que aprender a comer no tiene una fecha de vencimiento como sí lo tienen las “dietas”.